“La Liga más igualada del continente”. “La Liga más igualada
de los últimos 30 años”. “63-60-60”. Son algunos de los titulares que la prensa
utiliza para vender la “igualdad” que últimamente reina en la archiconocida “Liga de las estrellas”, actualmente
“Liga BBVA”. Una Liga venida a menos en los últimos años, por mucho que se
empeñen los de arriba en vendernos la moto, una Liga con unos horarios infames
que perjudican al hincha y una Liga en la que el dinero es sinónimo de triunfo.
Pero ante todo “igualdad”.
Imagen: footballtop.es
Una igualdad que vende, una igualdad que es tema de
actualidad allá por donde vayas, pero en definitiva una igualdad engañosa.
Echando un vistazo a la clasificación, me doy cuenta que existe una igualdad entre
los tres grandes equipos del campeonato. Grandes y con razón, ya que son los
tres con mayor presupuesto de la competición. Es decir, sin sorpresas. Voy
bajando la mirada y llego a los puestos de “Europa League”, ocupados por
Villarreal y Real Sociedad. Aquí llega mi primer
desengaño. Entre el líder (Real Madrid) y el quinto clasificado la
diferencia es de 20 puntos. Vamos, lo que se viene llamando igualdad.
Pero ahí no queda la cosa, llega el segundo desengaño. Valencia y Sevilla ocupan la séptima y octava
posición respectivamente, y se encuentran ni más ni menos que a 8 puntos de los
puestos de “Europa League” y a 28 del líder. Es decir, en tierra de nadie. La
parte baja de la tabla, como todas las temporadas, es un hervidero. Muchos
equipos luchando por no descender al infierno de Segunda… y aquí es donde quería llegar desde el
principio. Bendito infierno de Segunda División.
El tercer desengaño
que me llevo en una mañana de lunes como otra cualquiera. Se habla de igualdad
en Primera División, pero ¿es que nadie se ha fijado en la clasificación de la
“Liga Adelante”?
Imagen: altaspulsaciones.com
Tras 27 jornadas
ligueras transcurridas la igualdad es máxima. Entre el líder (Eibar) y el
colista (Alavés) sólo hay 16 puntos de diferencia. Curiosamente dos equipos
recién ascendidos que en la actualidad luchan por diferentes objetivos.
Si hablamos de
igualdad, hablamos de igualdad. Eibar, Depor y Recreativo se encuentran
empatados en la cabeza de la tabla, con el Sporting pisándolos los talones a
sólo un punto. Nueve equipos en sólo 3 puntos
luchan por los puestos que dan acceso a la fase de ascenso. Pero que no
se relajen, porque los 9 clubes restantes cierran la clasificación separados
por 4 puntos.
Una igualdad pasmosa.
El Mirandés (20º) ha ganado el mismo número de partidos (8) que el Numancia
(5º). Las Palmas (6º) ha perdido tantos encuentros (9) como el Girona (21º). Y
algunos equipos como el Alcorcón o el Girona, que el año pasado se enfrentaron
en el Play-Off de ascenso, a estas alturas de la temporada se encuentran en la
zona baja. Pero la Segunda División “mola” y aunque seas farolillo rojo esta
jornada, dos victorias consecutivas te aúpan a la zona noble de la
clasificación.
Imagen: diariovasco.com
Quizás sea fácil intentar explicar la igualdad basándose en
el restrictivo control financiero
aplicado por la LFP (Liga de Fútbol Profesional). Pero ahí aparece un equipo
que desmonta la teoría. El Eibar, líder con el menor presupuesto de Segunda
División (3’5 millones) mientras otros equipos como el Sporting o Las Palmas
casi triplican su presupuesto (10 millones). El dinero no es sinónimo de triunfo en la categoría de Plata.
Tampoco es sinónimo de triunfo contar con el máximo goleador en tus filas. En
Primera División, los máximos realizadores pertenecen a los equipos que luchan
por el título, véase el caso de Cristiano Ronaldo (Real Madrid), Diego Costa
(Atlético de Madrid) o Alexis Sánchez (Barça). En la olvidada “Liga Adelante”,
el pichichi defiende la zamarra del colista. Borja Viguera suma 18 goles con el Alavés, que con 39 goles a favor
es el tercer equipo máximo realizador de la categoría.
Bendito infierno, donde por cierto, los partidos se juegan
en fin de semana como toda la vida. Bendito infierno, en el que a día de hoy
reina el que tiene la cartera menos llena. Bendito infierno de igualdad.